Curiosos alados
Curiosos alados. Uno, dos, tres… Los grandes planeadores se acomodan con armonía mientras sus largos cuellos forman una sucesión ordenada. A los curiosos alados, no se les escapa nada. Uno mira hacia el este, otro hacia el oeste… allá uno controla Zurukuain por si algún osado vecino altera su inquieta contemplación y otro… ¡otro me mira a mí!